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Líder sin Visión
11:27
 

Líder Ajedrecista

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En fecha reciente compré un libro que me llamó la atención, se intitula “La Estrategia del Rey”, está escrito por Mark Miller y editado por Paidós empresa.

 

Miller nos hace reflexionar sobre el hecho de que la mayoría de los líderes estamos enfocados en dirigir como si jugáramos “damas” en vez de “ajedrez”.

 

En un juego de damas las fichas tienen idéntico valor y sólo pueden hacer dos movimientos: en diagonal o hacia adelante brincando una ficha.

 

En el juego de ajedrez contamos con un tablero similar al de damas, con 64 casillas. Pero las piezas del juego son diferentes y cada una tiene distinto valor de acuerdo con su importancia. Un ejemplo, un alfil vale tres puntos, pero los dos alfiles juntos en vez de seis valen siete puntos.

 

La metáfora del juego de ajedrez lleva al autor a plantearnos la necesidad de ser líderes con una mentalidad de ajedrecista. Comencemos aceptando que las personas, al igual que en el ajedrez, son diferentes y tienen distinto valor.

 

Miller nos dice que “en el ajedrez, entre más piezas involucres en el juego más posibilidades tienes de ganar”. Esta reflexión nos conecta con el hecho de que un líder debe involucrar a todas las personas concernientes a un asunto determinado. Le da fuerza al propósito y consigue ideas y recursos que facilitan su logro.

 

El planteamiento del autor consiste en llevar a cabo 4 jugadas maestras:

 

  1.  Apostar por el liderazgo. Desarrollar líderes desarrolla la organización. Insiste en la conveniencia de enfocarse en el desarrollo de líderes a lo largo y ancho de la cadena de mando. En cada área organizacional debe existir un líder que, a su vez, tiene la encomienda de desarrollar líderes. No debemos permitir que un líder de área no cuente con reemplazos bien desarrollados.

 

  1.  Actuar en conjunto. La alineación multiplica el impacto. Debemos abrir vasos comunicantes entre áreas y personas para que todos sepan el propósito y las prioridades de tal modo que tenga sentido el trabajo que realiza cada persona. No debemos permitir que un colaborador ignore para qué y por qué hace lo que hace.

 

  1.  Conquistar el corazón. El compromiso impulsa el esfuerzo. Entre más aprovechemos las habilidades únicas de cada persona más posibilidades tenemos de ganar. Cuando a las personas se les da la oportunidad de hacer aquello para lo cual están mejor preparados ganas su corazón. Necesitas colaboradores plenamente comprometidos.

 

  1.  Excelencia en la ejecución. La grandeza depende de la ejecución. Para ello nos sugiere medir lo que es más importante. Juega un papel determinante de la excelencia el contar con indicadores precisos en relación con el trabajo.

 

El autor nos proporciona una serie de tips para lograr una mejor organización, nos sugiere contar con un plan a largo plazo, pero no descuidar los programas de acción inmediata.

 

Resulta muy interesante que después de haber planteado sus cuatro jugadas maestras, el personaje que está llevando a cabo las sugerencias pierde al cliente más importante.

 

A partir de este momento comienza toda una revolución en la empresa del caso. Es para darnos cuenta que todo lo que hagamos tiene que estar enfocado en conseguir, mantener y aumentar el número de clientes. De nada sirve tener todo en orden, con certificaciones ISO 9000, 14000 o de cualquier otro tipo, si lo principal falla y esto es atraer y conservar clientes mediante una ejecución excelente, debidamente medida.

 

Finalmente, Mark Miller nos deja un planteamiento que nos guía y nos ayuda a superar el estándar de actuación que tengamos establecido. Nada como la mejora continua.

 

Te pido reflexiones y apliques estas 4 jugadas maestras y disfrutes de una semana feliz y productiva.

 


 

¡HASTA EL PRÓXIMO MIÉRCOLES!

 

RECUERDA: NADA CAMBIA HASTA QUE ALGUIEN TOMA LA INICIATIVA Y ÉSE…ES UN LÍDER. ¿ACASO ERES TÚ? LÁNZATE A LA ACCIÓN, NO LE TEMAS AL CAMBIO.

 

 

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